(dos jóvenes en un jardín)
L: ¿quieres hablar?
H: pos si...
L: ¿ahorita?
H: pos si ¿no?
L: ¿quieres café?
H: bueno...
Van a la cocina, preparan café y regresan al jardín. En el jardín H prende un cigarro, L ya no fuma.
L: a ver, ¿dime, como te sientes?
H: Pos triste, mal...
L: ¿quieres platicarme que pedo?
H: Si, checa: estuve tripeando sobre la naturaleza humana y los orígenes del ser humano. Encuentro triste el hecho de que somos animales con cerebros incontrolables, con miedos, con racionalizaciones basadas en sentimientos. Somos muy frágiles, siempre lo hemos sido y siempre lo seremos. Me siento deprimido porque mi entorno esta lleno de gente juzgando, porque comienzo a conocerme y se que siempre voy a estar metiéndome en pedos que me dan para abajo, que me deprimen; y después regreso a ser alegre. Pero, siempre voy a volver a deprimirme otra vez, lo se y eso me asusta. Estoy asustado porque todos los demás son como yo, viven siendo alegres y tristes, y según la intensidad de las alegrías caerán las depresiones. Ya se que va a suceder, voy a estar triste también en un futuro y con miedo. Pero lo que mas me entristece es: cual es el punto? Cual es el sentido de vivir? Para que hacerlo si no hay sentido, y el sentido, probablemente, se lo de uno; pero yo no quiero darle uno, ni siquiera lo que quiero me motiva...
L ve fijamente a H, y con paciencia responde
L: ¿Entonces estas deprimido porque la vida no te motiva porque ya sabes que va a suceder? ¿y por que eso te vas a deprimir?
H: hmmm, es mas complejo, pero si...
L: Bueno, mira, te voy a platicar del trip que traigo ahorita de con los budistas. En el budismo todo fluye, todo esta en constante cambio. La estabilidad y la quietud ni siquiera existe en nosotros, en los átomos, en las moléculas, todo esta en movimiento. Las circunstancias cambian, al igual que las oportunidades, los sentimientos, uno mismo y, por supuesto, las ideas. Estamos en este mundo transitoriamente y aferrarnos a algo, como tú al no tener un sentido en la vida (si es que existe) solo nos castiga y nos lleva al sufrimiento. Yo te recomendaría cambiar de filosofía, no buscar un sentido, ni tratar de entenderlo por el momento. Yo te recomiendo el “si” y el “hacer”, dejando de pensar tanto, de analizar, de encontrarle “por qué” a las cosas... Date oportunidades de experimentar, di “sí” a lo que generalmente le dices “no”, veras como cambian las cosas, encontrarás un universo nuevo, desconocido. ¿Sabes como fue que Lennon cayó rendido ante Yoko Ono?
H: no, ¿como fue?L: Pues John Lennon estaba en una galería de Yoko Ono, y vio una escalera que subiéndola llevaba a un recuadro blanco, donde aparentemente no había nada, sin embargo, de este colgaba una lupa y usándola y buscando cuidadosamente en el recuadro había un “yes” muy pequeño y escondido. Lennon quedó anonadado, Ono tenía el mismo trip que él. Para llegar al “yes”, Lenon tuvo que subir a una escalera que estaba sobre un estante de la galería, agarrar la lupa y buscar durante un tiempo algo que no esperaba: el “yes”...
Todo cambia, busca el "yes"...
Indudablemente todo cambia, no puedo esperar por el cuarto acto... Feliz Cumpleaños Laura, te quiero!
Que dulce la historia fratenal; de ahí se sacan muchas fuerzas, y tu inteligente manera de atesorarla.
ResponderEliminarAbraza a Laura de mi parte cuando la veas.
No había tenído el placer de leerte. Me has puesto la piel como dicen que a las gallinas se les pone.
ResponderEliminarPude verlos. Que regalo tan hermoso.
Tienes una hermana excepcional.
Y tu eres un hombre excepcional también, será quizá eso de la sangre.
Debe ser la sangre, no encuentro otra explicación... gracias por el amor y las buenas vibras!!
ResponderEliminaroye, como veo tu blog?
La veo hasta Diciembre y, claro, la abrazo de tu parte! Abrazos!
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